Caserío de Perales del Río 2
Datos del yacimiento
Yacimiento arqueológico
Edad del Bronce
La intervención arqueológica estuvo motivada por los necesarios estudios de impacto ambiental y vigilancia arqueopaleontológica debido a la construcción de la línea de alta velocidad Madrid-Barcelona, que en este punto discurre paralela a la de Madrid-Sevilla.
En toda esta zona ya había habido actuaciones arqueológicas desde la década de los años 1980 e incluso anteriores.
Se excavó una zona de 500 metros cuadrados que incluían el levantamiento de asfalto de la M301 entre el km 3,100 y 3,150 y que como resultado quedaron al descubierto ocho estructuras circulares negativas o subterráneas que se adscriben a la Edad del Bronce, aunque únicamente se excavaron seis de estos hoyos o fondos.
La sección y el tamaño de estos fondos varía, así como su contenido. Los de menor profundidad son lo que presentan mayor concentración de material pudiendo haber sido realizados únicamente para contener material de desecho.
No se han detectado suelos de habitación, ni agujeros que indiquen postes para cabañas o zanjas de cimentación. Sí se recuperaron restos de barro (manteados) que contenían ramajes y que podrían indicar restos de paredes de alguna cabaña.
A nivel general, algunos estudios interpretan que los espacios que separan los distintos hoyos podrían haber estado ocupados por cabañas u otro tipo de estructura de habitación. En el caso de este yacimiento podría deducirse, dada la proximidad con otros hoyos descubiertos en excavaciones cercanas, que en su conjunto formarían parte de «algún tipo de poblado de mayor entidad». (AA.VV., 2013)
Material recuperado
Industria lítica
Se recuperaron de 114 restos líticos, en los que aparece industria tallada, pulimentada o sobre canto. Predominan las lascas (47), en menor cantidad encontramos cantos (17), núcleos (13), fragmentos informes (10), nódulos (7), fragmentos de molino (6), restos de talla (6), hojas (5) y percutores (3).
En su mayor parte son piezas elaboradas en diferentes tipos de sílex, pero también encontramos las realizadas sobre cuarcita, en muy poca cantidad fragmentos de arenisca y granito, siendo prácticamente insignificantes las realizadas sobre ópalo, a pesar de abundar este recurso en los cercanos cerros de la Marañosa.
Por regla general son piezas de tamaño más bien pequeño que debieron utilizarse como elementos de corte directamente con la mano o con algún mango muy sencillo. No se aprecia que hubiese una selección previa del material, parece que se busca la inmediatez en la producción para desecharlas una vez utilizadas.
Algunas de las piezas fueron sometidas intencionalmente a tratamiento térmico.
Industria cerámica
Se recuperaron 554 fragmentos. Las cerámicas decoradas aparecen en muy poca cantidad y en ellas predomina el empleo de la técnica impreso-incisa. No se ha encontrado la técnica de boquique asociada a Cogotas I.
Las formas lisas son las predominantes sobre todo en las piezas grandes, en las pequeñas se ha observado que se tendía a un acabado interior más trabajado, siendo de mayor calidad que el exterior.
En cuanto al tipo predominan las piezas de gran tamaño como ollas globulares, cuencos y alguna cazuela. En el fondo VII se encontró una quesera (encella).
Se han podido apreciar dos tipos de cerámicas, por un lado las piezas que podrían estar destinadas a vajilla de mesa, elaboradas con pastas de mejor calidad y más trabajadas, con acabados más cuidados, suavizando la superficie mediante el uso de espátulas o bruñiendo las piezas mediante el empleo de cantos. Por otro lado estarían las piezas destinadas a la cocina y almacenaje, de mayor tamaño y paredes más gruesas, la arcilla con la que se han elaborado no ha sido tan seleccionada y los acabados son más rugosos.
Restos faunísticos
Se hallaron 167 restos poco fragmentados, entre los que predominan los de ovicápridos y vaca y en menor cantidad los de perro y caballo. Todas son especies domésticas, no hay presencia de especies salvajes.
Restos humanos
En el Fondo V se encontraron los restos de un cuerpo apoyado sobre el lado izquierdo y con la cabeza orientada hacia el norte, la datación mediante el C14 lo sitúa en el Bronce Pleno.
Únicamente se recuperaron los dos tercios inferiores del esqueleto, en muy mal estado de conservación. La ausencia del cráneo y otras partes necesarias para averiguar la edad de la muerte del individuo limita la fiabilidad a la hora de asignarle su edad, lo mismo ocurre con la determinación del sexo.
A pesar no poseer evidencias fiables se piensa que podría tratarse de una mujer adulta.
Bibliografía y fuentes consultadas
- AA.VV. (2013). “Nuevos datos para el estudio de la Edad del Bronce en la Comunidad de Madrid : los yacimientos de Perales del Río 2 y La Peineta” . Área Científica y de Divulgación, Auditores de Energía y Medio Ambiente. ISBN:8461141288